Existe un gran tesoro muy cerca de la península, es un lugar tranquilo, donde la naturaleza se preserva, los Parques Naturales la envuelven y el mar mediterráneo la abraza. Menorca no solo es bella por su naturaleza, desde hace ya 50 años logró el reconocimiento de Reserva de la Biosfera por la UNESCO.
Menorca es la mayor Reserva de la Biosfera del Mediterráneo.
Ello fue posible gracias al estrecho vínculo entre sus habitantes y el territorio, que se ha ido transformando de manera respetuosa y compatible con el crecimiento económico. En Menorca siempre ha prevalecido protegido su zona terrestre, pero desde junio lo es también la marítima. Se ha ampliado hasta 12 millas mar adentro de la zona que rodea la costa permitiendo multiplicar por siete sus límites protegido, convirtiéndose en la Reserva de la Biosfera con más superficie marina del Mediterráneo.
Menorca,Tierra de paso y abrigo de numerosas civilizaciones
A lo largo de su historia, han pasado griegos, fenicios, cartagineses, romanos, musulmanes, bizantinos… y, más recientemente, británicos y franceses, esto es debido a su enclave geográfico privilegiado unido a las condiciones climáticas tan favorables y la riqueza de sus costas. Actualmente Menorca es un oasis de relajación bañado por las aguas del Mediterráneo. Una pequeña isla de apenas unos 700 kilómetros cuadrados, pero grande en cuanto a la diversidad de hábitats que acoge, especies animales y plantas endémicas. La labor iniciada décadas atrás a favor de conservar estos hábitats y favorecer el desarrollo sostenible le valieron a Menorca en octubre de 1993 el reconocimiento como Reserva de la Biosfera por la UNESCO.
Mientras otras islas del archipiélago buscaban un turismo masivo, de fiesta y sin mirar las futuras consecuencias, Menorca apostaba por conservar los recursos naturales, el patrimonio cultural y paisajístico de la isla y es que la belleza del entorno rural tradicional queda de manifiesto paseando por ella, admirando ese entramado de muros de piedra que delimitan sus tierras y constituyen una de sus señas de identidad. Todo ello, perfectamente integrado con su actividad agrícola y ganadera.
Los amantes del turismo slow disfrutarán mucho en Menorca
En Menorca encontrarán el lugar ideal para una escapada en la que el tiempo parece detenerse. El epicentro de esta Reserva de la Biosfera es el Parque Natural de la Albufera des Grau, al norte de Maó. Cuenta con unas5.006 hectáreas que integran una laguna salobre, un tramo costero una zona marina y varios islotes, con humedales que favorecen la nidificación de aves rapaces y acuáticas.
Recorremos su Camí de Cavalls
A pié, en bicicleta o a caballo por los 184 kilómetros de recorrido (GR-223), un itinerario que bordea todo su perímetro costero y nos permite admirar calas vírgenes, barrancos y acantilados que nos ofrecen un espectáculo visual inolvidable. Este itinerario, también nos brinda un paisaje geológico de gran riqueza, con un variado mosaico de rocas con más de 400 millones de años de historia y dos zonas bien diferenciadas: tramontana, al norte, y migjorn, al sur.
Ampliación de su Reserva de la Biosfera
Hasta el mes de junio de 2019, el estatus de Reserva de la Biosfera solo se aplicaba a la zona terrestre y a una pequeña franja marina alrededor del Parque Natural de s’Albufera des Grau. Pero con la ampliación aprobada por la UNESCO ahora incluye toda la zona marina de la isla, hasta 12 millas mar adentro. Esto convierte a Menorca en la Reserva de Biosfera con más superficie marina del Mediterráneo, pasando de tener 71.191 hectáreas a 514.487, ¡casi siete veces más!
Además Menorca cuenta, con dos reservas marinas, delimitaciones que sirven para regular los usos y la explotación del medio marino con objeto de incrementar la regeneración natural de los recursos y de conservar los ecosistemas marinos. Son la Reserva Marina del Norte de Menorca y la Reserva Marina de la Illa de l’Aire, al sureste de la isla. Esta última, como la ampliación de la Reserva de Biosfera, también ha sido aprobada este año.
Con esta ampliación marítima, Menorca atesora una Reserva de la Biosfera mucho mayor que su propio territorio insular, que ahora se convierte solo en la punta del iceberg de este auténtico paraíso natural mediterráneo.
Más información en www.menorca.es