Carcassonne pasa por ser una de las ciudades medievales más románticas de Francia.
A muy pocos kilómetros de la frontera española nos ofrece una oferta cultural y de ocio muy sugestiva además de una gastronomía exquisita.
2.000 años de historia, con episodios destacados en las luchas contra los Cátaros o su papel en la Guerra de los Cien Años, han servido para que esta ciudad fortificada sea poseedora de dos sitios declarados Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO: su Ciudadela o ciudad medieval y el Canal du Midi.
La ciudad de Carcassonne presenta dos partes perfectamente diferenciadas: la Ciudadela (la más antigua, protegida por dobles murallas medievales, con laberínticas calles completamente peatonalizadas, fachadas de piedra flanqueadas por parterres de flores y acogedoras terrazas) y La Bastida de San Luis (a orillas del Midi y a los pies de la ciudadela, de trazado en forma de cuadrícula). Entre ambas partes, conectándolas el Puente Viejo (del siglo XV, sobre el río Aude con 12 arcos es parte del Camino de Santiago Francés).
El Canal du Midi, es uno de los canales navegables más antiguos de Europa. Su construcción comenzó en el siglo XVI y concluyó coincidiendo con la Revolución Francesa. Imponente obra de ingeniería que comunica el Garona con el Mediterráneo, 260 km., ha sido históricamente fundamental para el transporte al tener como objetivo comunicar Atlántico y Mediterráneo.
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