La isla de Kos es ¡un paraíso vacacional! En el corazón del archipiélago del Egeo, Kos es una auténtica isla griega que pertenece al complejo de islas del Dodecaneso. Kos combina lo clásico con lo moderno, ofreciendo decenas de playas de fácil acceso, monumentos históricos, exuberante vegetación y aguas de un azul celeste que atraen a más de un millón de visitantes anualmente.
Una de las islas más grandes
La isla se encuentra a 338 km (210 millas) de Atenas, mide 40 por 8 kilómetros y tiene una costa de 112 kilómetros. Kos está clasificada como la tercera isla más grande después de Karpathos y Rodas, y la segunda más grande en términos de población (aproximadamente 35,000 personas) después de Rodas.
Su recientemente renovado aeropuerto internacional, Hipócrates, ofrece vuelos diarios con Atenas que duran aproximadamente 40 minutos. Desde primavera hasta otoño, el aeropuerto conecta diariamente la isla con varios países europeos.
Kos destaca como el principal destino de playa del Dodecaneso; un verdadero oasis mediterráneo tanto para entusiastas de la historia como para buscadores de aventuras. Su vasta vegetación, clima templado, aguas de color azul y costas interminables forman un paisaje de belleza extraordinaria, ideal para las vacaciones de verano.
Largas costas doradas y su clima mediterráneo
Su clima es benigno con veranos calurosos y soleados llegando a alcanzar los 35º e inviernos suaves y lluviosos con temperaturas suaves. La tranquilidad reina en la isla, se pueden dar largos paseos por las playas de arena dorada, tomar el sol bajo en una hamaca bajo una sombrilla o nadar en las claras aguas del Egeo.
Un isla con larga historia
La isla tiene una rica historia que se remonta a tiempos prehistóricos, alrededor del 3000 a.C. También se la describe a menudo como un museo al aire libre, y con razón, ya que cuenta con docenas de sitios arqueológicos y ofrece numerosos eventos culturales durante todo el año. Hipócrates (460-377 a.C.), el padre de la medicina y autor del Juramento Hipocrático, practicó y enseñó su medicina en el antiguo Asklepieion, uno de los hitos más emblemáticos conservados en el campo de Kos.
Construido para promover las enseñanzas de Hipócrates, el Asklepieion de Kos era un santuario religioso dedicado a Asclepio (antiguo dios griego de la curación e hijo de Apolo). Se consideraba el centro de curación definitivo del mundo antiguo y fue donde Hipócrates de Kos, el médico más famoso de la antigua Grecia, estableció su escuela de medicina.
Diversos monumentos históricos son testimonio del cruce de civilizaciones en la isla. Iglesias, mezquitas otomanas, arquitectura romana distintiva, palmeras exóticas y, por supuesto, castillos medievales, forman una fusión extraordinaria de un paisaje cultural destacado y una belleza natural.
Destacada hospitalidad de sus gentes
Lo que otorgó a Kos su posición entre los destinos griegos más populares a nivel mundial, son sus habitantes. La genuina hospitalidad griega es insuperable en Kos, con los lugareños son muy hospitalarios, conocerás de primera mano los sabores locales, costumbres y festividades. No es de extrañar que cientos de visitantes elijan repetidamente Kos para sus vacaciones de verano desde hace décadas.
Gastronomía mediterránea
Si buscas una escapada de playa, cultura o gastronomía, ¡Kos es tu destino ideal para este verano! El tamaño relativamente pequeño de la isla permite una variedad interminable de actividades con los que pasar el tiempo al aire libre. Ciclismo, paseos a caballo, ciclismo de montaña, senderismo, excursiones por islas cercanas, deportes acuáticos, windsurf, kitesurf, buceo y muchas más actividades relacionadas con el mar. Estas son algunas de las opciones para disfrutar durante tus vacaciones.
En cuanto a la gastronomía, Kos como un destino mediterráneo dispone de una rica cocina con una variedad importante de productos locales. Desde el famoso «krasotyri», o queso de vino, y el dulce de tomate tradicional, hasta la variedad de vinos locales, miel, aceite de oliva y mucho más, Kos es una fuente de productos locales y delicias culinarias.
Paraíso natural
Para los amantes de la naturaleza y la observación de aves, observar colonias de flamencos rosados exóticos en los humedales de Tigaki o Psalidi, los pavos reales del bosque de Plaka o hacer senderismo por la cima del monte Dikaios, son solo algunas de las innumerables formas de conectarse con la naturaleza y sentir el aire fresco. Para aquellos más disfrutones, degustación de vinos, tours de elaboración de miel o visitar granjas, Productores de vino, queso, aceite de oliva y miel realizan vivitas guiadas a través de sus viñedos, granjas y campos.
Con solo una cadena montañosa, ¡Kos es tan plana como se puede! Conocida ampliamente como la «isla de las bicicletas» desde hace décadas, Kos cuenta con un total de casi 10 millas de carriles bici, un destino fácilmente accesible, que ofrece más de 6,500 bicicletas disponibles para alquilar y tiendas de bicicletas de alta gama y el ciclismo es una actividad diaria y común para los lugareños y visitantes por igual. La cultura local extremadamente amigable con las bicicletas de la isla hace que sea fácil andar en bicicleta, siendo las el principal medio de transporte.
Para los amantes de la naturaleza y los exploradores de montañas, la isla ofrece cientos de kilómetros de senderos de montaña con fácil acceso desde el centro de la isla. Las opciones de ciclismo son verdaderamente interminables en la isla. Además, Kos es un excelente punto de partida para viajes en velero. La marina de Kos es una de las más grandes y organizadas del Mediterráneo, con un total de 250 amarres, capaz de acomodar yates de 8 a 80 metros. Las islas del Dodecaneso ofrecen excelentes aguas para navegar, muchos rincones escondidos y abundantes mares azul marino. Rodeada de diversas islas, Kos ofrece oportunidades únicas para cruceros diarios y viajes cortos que comienzan desde el puerto principal de Kos, Kardamena o Mastihari.
Intensa vida nocturna
Cuando cae la tarde y llega la noche en los diversos bares y clubes repartidos por la isla ofrece la posibilidad de asistir a las fiestas nocturnas, degustar un buen cóctel o simplente dejarse llevar por la música.
En resumen, Kos ofrece una amplia gama de experiencias de viaje para todos. Y dado que las temperaturas son suaves durante la mayoría de los meses de otoño, principios de otoño también se considera un buen momento para explorar los sitios arqueológicos, playas, bodegas y bellezas naturales impresionantes de la isla. Capaz de ajustarse a tus deseos de viaje personales, Kos es el lugar donde todos, desde parejas hasta familias, comparten un tramo de arena dorada.
