Más de 300 estadios, torres, estatuas, edificios de interés y enclaves icónicos del mundo se iluminaron de verde como parte de la iniciativa de la Ola Verde para conmemorar San Patricio, la principal fiesta de Irlanda que tuvo lugar el pasado día 17 de marzo y que se alza como la festividad nacional más celebrada del mundo.
España ha contado con localizaciones teñidas de verde de norte a sur. Como principal novedad el estadio de San Mamés, en Bilbao, que desde las 21.00 horas contagió a la ciudad del espíritu de San Patricio. El recinto se suma a otros rincones españoles, desde la Torre de Hércules, en La Coruña, o la Capilla de San Patricio y la Torre Medieval en Llanes (Asturias), hasta la Plaza de España de Adeje, en Tenerife. Madrid aportó La Cibeles y la Puerta de Alcalá, mientras que en Barcelona brillaron las fuentes gemelas de la Plaza de Catalunya. La provincia de Málaga participó con el célebre Arco de Marbella, y la ciudad de Murcia con la fachada del edificio de la Empresa Municipal de Aguas y Saneamientos (Plaza Circular) y uno de los edificios más emblemáticos de la localidad, ubicado junto al ayuntamiento. Cierran la lista el ayuntamiento, el Mercado Municipal y el puente de Tortosa (Tarragona).
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El Arco de Marbella de Verde por St. Patrick day[/caption]
Pero la Ola Verde llegó a todas las latitudes del mundo con estas iluminaciones en varios de los monumentos más importantes del planeta. Es el caso del London Eye, el Empire State Building de Nueva York, la Civic Opera House de Chicago, las Cataratas del Niágara, la basílica del sagrado Corazón de París, el Coliseo de Roma, la Ópera de Sídney, el Cristo Redentor de Río de Janeiro o la Canton Tower de Guangzhou (China), entre otras muchas.
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El Coliseum de Roma de Verde por St. Patrick day[/caption]
Entre las nuevas localizaciones mundiales, figuran el monumento Wawa Goose en Ontario y el Hábitat del Oso Polar Cochrane (también en Ontario), el Museo Nacional del Fútbol en Manchester, el Palais de l’Europe (sede del Consejo de Europa) en Estrasburgo, el centro comercial Beaugrenelle en París, el hermoso Kunsthistorisches Museum y el Naturhistorisches Museum en Viena, el edificio Königsbau en Stuttgart, Uilenburgersjoel Amsterdam, la Torre marina de Yokohama en Japón, el Monumento Pen en Hanoi, el estadio Sammy Ofer en Haifa, así como Vabaduse Väljak (Plaza de la Libertad) en Tallin, Estonia.
Mientras tanto, Dublín celebró su día grande el 19 de marzo el célebre Festival de San Patricio, con un sinfín de actividades culturales y de ocio que no dejaron indiferente a nadie. Bajo el lema Home, el festival demostrará el carácter welcoming o de bienvenida de la sociedad irlandesa, que alcanzará su máxima expresión durante el evento central, el desfile, que tiene lugar el día 17 al mediodía y que este año recorrio con su característico color y elegancia la capital bajo el título Home is where the heart is -El hogar se encuentra donde esté el corazón-. Al espectáculo acudieron compañías de todo el país para celebrar esta amistosa temática, y se sumaron 2.000 miembros de bandas de Norteamérica y Alemania –así como de Irlanda- para poner el ambiente musical a la ruta de 2,8 kilómetros.
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